En memoria del Lic. Héctor Nicolás Siáñez Anchondo en su primer aniversario luctuoso.
Bien dijiste..."El día que yo me muera, todo va a cambiar, están acostumbrados a que todos los traten bonito, pero el día que yo no esté, mis amigos les darán la espalda, como me la dieron a mí el día que falleció mi padre"
Y claro que no te creí papá y hoy todo lo que me dijiste se realizó, Tus hijos intentamos adaptarnos a nuestra nueva vida, ya que cuando estabas tú, era como estar en una enorme esfera de cristal donde nadie podía tocarnos ni hacernos daño. Hoy la esfera está rota y hemos conocido con amargura la realidad de la vida.
Deseamos verte pronto y te damos las gracias por todo lo bueno que nos diste en ése cuento de hadas. Por favor, protégenos desde el cielo.
Si todavía tienes a tu Padre, aprovéchalo, mímalo, abrázalo, dile que lo amas. Házlo, que no te dé pena...pena la mía que tiempo tuve y no lo hice.
Brenda, Brisa, Adriana, Joselyn y Héctor
Bien dijiste..."El día que yo me muera, todo va a cambiar, están acostumbrados a que todos los traten bonito, pero el día que yo no esté, mis amigos les darán la espalda, como me la dieron a mí el día que falleció mi padre"
Y claro que no te creí papá y hoy todo lo que me dijiste se realizó, Tus hijos intentamos adaptarnos a nuestra nueva vida, ya que cuando estabas tú, era como estar en una enorme esfera de cristal donde nadie podía tocarnos ni hacernos daño. Hoy la esfera está rota y hemos conocido con amargura la realidad de la vida.
Deseamos verte pronto y te damos las gracias por todo lo bueno que nos diste en ése cuento de hadas. Por favor, protégenos desde el cielo.
Si todavía tienes a tu Padre, aprovéchalo, mímalo, abrázalo, dile que lo amas. Házlo, que no te dé pena...pena la mía que tiempo tuve y no lo hice.
Brenda, Brisa, Adriana, Joselyn y Héctor
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